Cerca de Alcalá la Real, en las vecinas sierras subbéticas, nos encontramos una ciudad con mucho encanto y la conocida como «cuna del barroco». En esta entrada nos vamos a Priego de Córdoba
Rara es la persona que no se acerca a Priego de Córdoba para conocer sus iglesias aunque sea desde el exterior, pero la ciudad alberga más sorpresas además de las fachadas impresionantes de estos edificios.
Desde la calle Rio, calle conocida por haber sido el espacio donde anteriormente se podía ver cauce de agua que se formaba en la Fuente de la Salud unos metros por encima de este. Ya podemos intuir la riqueza de esta ciudad.
En la calle encontraremos la casa-museo de Niceto Alcalá Zamora que llegó a ser presidente de la República (1931-1936). Siguiendo nuestro camino calle arriba encontraremos uno de los lugares que particularmente más me gustan, la Fuente de la Salud y la Fuente del Rey, ambas de estilos e historias diferentes que dan un aire fresco y relajado a la ciudad.
Y desde este remanso de paz, pasaremos a hablar de diferentes iglesias, no sin antes echar un vistazo a uno de esos elementos etnográficos que a mi tanto me gustan: el lavadero público que además podemos ver aún hoy decorado con diferentes macetas y flores.
Si quisiéramos hablar de edificios no eclesiásticos de la ciudad, podríamos hablar también del Recreo de Castilla, un paseo cubierto por diferentes especies de árboles y plantas donde también encontraremos un lugar de encanto para relajarnos. Sin alejarnos mucho tendremos cerca las Carnicerías Reales ( s.XVI ) donde nos encontraremos con un patio interior con alguna que otra sorpresa y una escalera de caracol ideada para subir grandes piezas de carne para su despiece y trabajo muy curiosa.
Y por supuesto, qué sería de una ciudad así sin castillo, tenemos el castillo de Priego de Córdoba. Una torre del homenaje llamada la «torre gorda» que tiene tres plantas y cómo no, una leyenda interesante de aquéllos tiempos tumultuosos de peleas entre musulmanes y cristianos.
Otro lugar digno de mención, es su maravilloso Barrio de la Villa. Un barrio de calles estrechas, paredes encaladas y macetas de geranios que se engalanan aún más en los meses de mayo (mes de los patios cordobeses) y diciembre (para la época navideña). Andando por sus calles, encontraremos diferentes iglesias, algunas fuentes, y ya casi en el exterior incluso la imagen de Joselito y el paseo de Colombia.
Y sí, tras este paso por sus aguas, y demás edificios, nos vamos a ver las iglesias de Priego de Córdoba.
La riqueza de iglesias en Priego de Córdoba es espectacular, no en vano la llaman » la cuna del barroco». Cúpulas gallonadas, retablos espectaculares, mármoles de colores y ciento y un mil detalle que encontraremos en cada uno de los edificios que componen la estructura eclesiástica. ¿Que no es suficiente información? Seguro, pero es que todo lo que se pueda decir y explicar sobre ellas se va a quedar corto, lo mejor es visitarlas y si se tiene la opción de hacer la visita guiada, mejor que mejor. Para coger más información e ideas sobre la visita a Priego de Córdoba, pinchad aquí. Mientras os dejo unas fotos para abrir apetito.